Comienza una nueva temporada de cultivo exterior para todos los cultivadores que vivan en el hemisferio norte del planeta. La llegada de la primavera es el indicativo de referencia para comenzar a prepararlo todo. Elegir una variedad de marihuana adecuada, un lugar soleado donde cultivarla y utilizar correctamente los abonos, te servirá de ayuda para obtener unos excelentes cogollos al final de la temporada.
¿Qué semillas de marihuana puedo plantar en cultivo exterior?
Antes de comenzar incluso con los preparativos, debes elegir correctamente las semillas de marihuana para tu cultivo exterior. Muchos cultivadores piensan erróneamente que todas las semillas son iguales cuando, en realidad, existen miles de variedades diferentes.
¿Índica o sativa?
Las semillas de marihuana que compres deben ser las que mejor se adapten a tu entorno. Si vives en un lugar donde el verano es corto y no hace mucha calor, la mejor opción es comprar semillas de variedades índicas. En cambio, si vives en una zona donde los veranos son largos y calurosos, puedes optar por variedades sativas.
La diferencia entre índicas y sativas no solo está en su forma de crecer ni en su tiempo de floración, también tienen amplias diferencias en el efecto que producen sus cogollos al fumarlos. Por tanto, es recomendable que conozcas de antemano todos los tipos de plantas de marihuana que existen en el mercado.
Una vez compradas las semillas que hayas decidido usar, ya puedes comenzar con los demás preparativos, por ejemplo: preparar la maceta y la tierra del jardín/bosque donde vayas a cultivar. En esta ocasión, nos centraremos en explicar el cultivo exterior más común que es el de maceta.
Preparativos para el cultivo exterior en maceta
¿Qué tipo de maceta utilizo para cultivar en balcón?
Necesitarás una maceta de buen tamaño ya que, cuanto más grande sea la maceta, más grande será la planta y, en consecuencia, más cogollos obtendrás. Aunque si la altura puede suponer un problema, entonces, será recomendable no utilizar más de veinte litros.
Para balcones convencionales, normalmente se utilizan macetas más pequeñas, de unos doce o quince litros de capacidad, por ejemplo. Tu planta no medirá dos metros, pero igualmente podrás sacar buenos cogollos de ella.
¿Qué tipo de sustrato puedo utilizar?
Comprar una tierra o sustrato de buena calidad es sinónimo de obtener buenos resultados. Olvídate por completo de los sacos de tierra barata que hay en las superficies comerciales y compra tierra especial para el cultivo exterior de marihuana. Puedes encontrarla en cualquier grow shop a precios muy económicos.
¿Cuándo comienzo el cultivo exterior en maceta?
Cuando llegue la primavera, a ese punto en el que ya empieza a hacer calor y los días se alargan notoriamente, debes plantar la semilla. Hay quien la planta mucho antes, pero entonces se corre el riesgo que el mal tiempo o las heladas la dañen o incluso la maten. Si no tienes experiencia, lee detenidamente nuestro post sobre cultivo de cannabis para principiantes. ¡Aprenderás de forma sencilla!
¿Cuándo comienzo a utilizar abonos de crecimiento?
No es necesario abonar durante el primer mes de vida, ya que la tierra de calidad tiene todos los nutrientes que tu planta necesita. Es importante que la tierra no se seque nunca por completo, así que debes revisarla periódicamente y regarla cuando sea necesario. Ponerla en un lugar donde reciba el máximo número de horas de sol directo al día, hará que crezca rápido y fuerte.
A partir del primer mes de vida, podrás comenzar a darle un poco de abono en los riegos alternados, de forma que regarás una vez con agua y una vez con un poco de abono. Siempre usarás, más o menos, la mitad de la dosis que recomienda el fabricante, la planta crecerá a buen ritmo sin ninguna carencia. Es recomendable medir el ph con un medidor digital, por menos de 15 € puedes encontrarlo.
La planta de marihuana irá creciendo a buen ritmo hasta que el verano llegue a su punto álgido y los días comiencen a acortarse poco a poco. Entonces, la planta comenzará a florecer. Es aquí cuando debes estar más atento, ya que de esto depende la calidad y cantidad de cogollos que obtengamos.
¿Cuándo comienzo a utilizar abonos de floración?
Cuando la planta comience a mostrar mucho crecimiento de flores, pequeños cogollos sin desarrollar o «pelos» (como prefieras llamarlo), es cuando debes comenzar a utilizar un abono rico en fósforo y potasio. En cualquier tienda de jardinería o grow shop, puedes encontrar abonos para floración.
Este tipo de abono contiene los nutrientes necesarios para que la planta pueda desarrollar cogollos más grandes y densos, pero no cometas el error de añadir más abono del recomendado (la mitad de la dosis del fabricante, un riego sí y un riego no) o tu planta puede terminar sobre-fertilizada o con un sabor realmente asqueroso.
¿Cuándo realizo la cosecha, el secado y el curado?
Cuando los cogollos se hayan puesto bien gordos, pero sus «pelos» sigan siendo en su mayoría blancos, debes dejar de utilizar abonos y continuar sólo con agua hasta el final del cultivo. Unos quince días antes de cortar la planta, debes realizar un buen lavado de raíces para eliminar cualquier resto de abono o nutrientes del sustrato.
De esta forma, obligarás a la planta a consumir los nutrientes que tiene almacenados y el sabor de los cogollos al fumar será mucho más rico e intenso. Una planta sobrecargada de nutrientes es prácticamente infumable.
Cuando cortes los cogollos y los seques correctamente, debes dejarlos al menos tres meses en sus frascos para que curen. Abriéndolos de vez en cuando para eliminar el posible exceso de humedad. A partir de los tres meses, los cogollos estarán sencillamente… ¡tremendos!