El hachís es una resina que se extrae de la planta de cannabis, utilizada por diferentes culturas por sus propiedades medicinales y recreativas. Aunque en muchos países, como en España, sigue siendo ilegal, su popularidad no para de crecer. En este post, nos centraremos en cómo hacer bellotas de hachís, una de sus formas de uso.
Si bien es cierto que se pueden comprar en los lugares donde se ha legalizado, muchos prefieren hacer sus propias bellotas de hachís en casa y adaptarlas a sus gustos personales. También es una forma de asegurarse de la procedencia de los ingredientes de las mismas.
¿Qué son las bellotas de hachís?
Las bellotas de hachís son un producto de hash con la forma de este fruto seco. Se elabora a partir de uno de los tipos de extracción de hachís y, usando las manos, se ovala hasta que se asemeja a una bellota. Esta forma facilita su dosificación. Desafortunadamente, es conocido en todo el mundo por actuar como supositorio para almacenar varios gramos de la sustancia, y traficar con ellas en países donde todavía no es legal.
Tipos de extracciones de hachís
Existen varias formas de realizar un concentrado de hachís, cada uno con sus propias características y métodos de producción. Los más comunes son:
- Hachís de tamizado. Se elabora tamizando las flores de cannabis con una malla fina, a través de la cual se deslizan los tricomas de las mismas. Éstos se conocen como polen o hachís.
- Hachís de agua y hielo. En este caso se introducen las flores en un recipiente o lavadora Ice-O-Lator con agua fría y hielo mientras se remueve la mezcla. Ésto hace que se desprendan los tricomas.
Ambos concentrados pueden moldearse siempre y cuando la materia prima (flores de marihuana) sea de calidad. Por lo tanto, el primer paso para aprender cómo hacer bellotas de hachís es escoger una planta cultivada de forma óptima.
Cómo hacer bellotas de hachís paso a paso
Básicamente, para elaborar bellotas de hachís sólo es necesario saber llevar a cabo una de las formas de hacer hachís y darle la forma deseada.
Proceso de extracción
Como ya se ha comentado, la marihuana utilizada debe ser de la mayor calidad posible. Así, lo serán también las bellotas resultantes de esta receta.
Hachís en seco o Dry Sift
Esta técnica es tan sencilla como colocar las flores de cannabis y restos vegetales azucarados congelados encima de un tamiz y agitarlo suavemente, mientras los tricomas se desprenden. Pero no puede emplearse cualquier tamiz, pues debe tener un micraje determinado, aunque dependerá de los resultados que se quieran obtener.
De los tamices con las micras más pequeñas, resultará un Kief de mejor calidad. El Kief o Kifi es como se conoce al conjunto de tricomas que resultan de este proceso, el cual se asemeja al polvo, con un poco más de grosor. Éste será el que se comprimirá para darle forma. Así es cómo se hacen las bellotas de hachís. Este último paso se explicará detalladamente más adelante.
Hachís con agua y hielo
Este proceso es algo más complejo porque requiere un número mayor de pasos.
- Congelar los cogollos o el material vegetal resinoso.
- Preparar la lavadora Ice-O-Lator, o un cubo con agua y hielo en su defecto.
- 4ºC o menos. Es la temperatura que debe mantener el agua en todo momento, por lo hay que vigilar por si necesita ser regulada.
- Remover el agua con hielo y con las flores, o programar la lavadora para que lo haga automáticamente. Ésta última opción dará mejores resultados.
- Mientras, preparar un cubo hondo con diferentes mallas para Bubble Hash, colocándolas en orden: las de mayor micraje deben quedar más cerca de la superficie.
- Vaciar la lavadora por el tubo de desagüe o avocar el recipiente sobre las mallas.
- Recuperar el hachís respetando la separación por mallas. Dependiendo del tamaño, tendrá una calidad u otra. Del Kief de las mallas con los agujeros más pequeños será hachís de calidad superior; el de las mallas con agujeros más grandes, de menor calidad.
- Escurrir la resina en la malla de secado.
- Secar el hachís y curarlo utilizando los métodos tradicionales. Es recomendable separarlo utilizando un colador de metal para evitar la aparición de moho.
Prensado de la resina
Es el momento de moldear el Kief en forma de bellota. Hay varias formas de hacerlo pero las más sencillas de llevar a cabo en casa es utilizando un molde, o con las propias mano. Al final, lo importante es aplicar presión y calor.
En el caso del molde, se introducirá la cantidad adecuada de Kief en su interior y se presionará entre las manos, ésto también aportará el calor suficiente. Si le cuesta pegarse al molde, pueden humedecerse sus paredes. Una vez listo, dejar secar el tiempo pertinente para evitar la aparición de moho.
En el caso de hacerlo con las manos, puede utilizarse un papel antiadherente o algo parecido para moldear. Únicamente habrá que coger una cantidad del Kief y empezar a moldearlo aplicando presión con las manos, lo cual aportará calor indirectamente. Si le cuesta compactarse, como con el molde, puede humedecerse y dejar secar la pieza una vez terminada.
Siguiendo estos pasos, cualquier persona puede saber cómo hacer bellotas de hachís. No obstante, también es interesante conocer sus propiedades antes de usarlas.
Propiedades de las bellotas de hachís
Las propiedades y efectos de las bellotas de hachís dependen de la materia prima empleada para su elaboración, es decir, la genética de la marihuana. A rasgos generales, se puede dividir en dos grandes grupos: bellotas de hachís de THC y bellotas de hachís de CBD.
Cuando este producto es de calidad, contará con altos niveles de THC, es decir, que tendrá los efectos del cannabis pero más intensos y potentes, pues el hachís está constituido sólo por su compuesto activo, sin materia vegetal. Es decir, será psicotrópico. Por ello, acusarla euforia, relajación profunda y distorsión de la percepción sensorial.
En el peor de los casos producirá ansiedad y paranoia. Además, existen indicios que indican que puede causar problemas cognitivos como pérdida de memoria, dificultad para concentrarse, tristeza y otros trastornos emocionales y psicológicos.
Las bellotas de CBD, por otro lado, contendrán todos los beneficios del cannabidiol: alivio del dolor, reducción de la ansiedad y el estrés, mejora y aumento de la calidad del sueño, neuroprotección, reducción de las convulsiones, alivio de náuseas y vómitos, disminución de la inflamación, etc.
Por lo tanto, hacer ladrillos de hachís es tan fácil como hacer bellotas de hachís, sólo habrá que moldearlo con otra forma. Sea como sea, las propiedades y el sabor será el mismo. Lo más importante de todo, es que la materia prima sea de calidad.